La guerra económica no requiere de partidos, no necesita de caras visibles, simplemente se trata de provocar los falsos valores para que se desaten los males como una jauría.
La economía venezolana es rentista, así como lo es la peruana. Es decir, se basa en extraer recursos y venderlos, así la ganancia es más rápida, no requiere de esperar y tener la paciencia de un agricultor o el conocimiento de un industrial, lo cual implicaría años de esfuerzos y esperanzas.
La economía rentista no espera, quiere la ganancia ya, en el menor tiempo posible y con el mínimo esfuerzo.
Cuando en Venezuela vemos a los empresarios e incluso a los propios chavistas acaparando productos para venderlos en el mercado negro e incluso llevarlos a Colombia, implica que los valores rentistas priman sobre cualquier valor político o de empresa con visión.
El gobierno venezolano impide la especulación mediante leyes que la condenan, poniendo un tope a las ganancias de acuerdo al costo del producto, entonces las empresas esconden el producto de los anaqueles y los negocian en un submercado, logrando mayores ganancias. Otro camino es llevar esos productos hacia Colombia, en donde el precio es mucho mayor.
El venezolano promedio es rentista, sigue ese camino sin importarle que con ello perjudica a su país.
El análisis psicológico va justamente a los valores rentistas que tienen los venezolanos. Los valores del mínimo esfuerzo y buenas ganancias.
En el Perú no soportaríamos una guerra económica como lo que pasa en Venezuela, porque nuestra economía es altamente rentista y la industria no existe. Somos un país de servicios, razón por la cual me hace creer que esto no es por accidente, se trata de una intención clara de que sigamos así, porque así somos más vulnerables y la independencia económica se torna inalcanzable.
Vemos a venezolanos vendiendo arepas, un negocio de mínimo conocimiento. No veremos a venezolanos inventando, creando, construyendo, eso demanda mayores esfuerzos en el corto plato, pero soluciones mejores en el largo plazo.
En el Perú el rentismo es cultural, negocios con el mínimo esfuerzo.Vender minerales y ya, mejor ganancia segura que desarrollar algo que demanda esfuerzo y conocimiento.
Ningún país desarrollado ha pasado por el rentismo. Japón tiene una cultura empresarial, y no se trata de comerciantes, eso de compro y vendo, eso no es empresa. Se trata de adquirir conocimiento para inventar, crear, y respetar los procesos humanos y técnicos.
